Independencia financiera

Somos libres financieramente pero eso no cambia (casi) nada. El gran aprendizaje de nuestra libertad financiera que quiero compartir contigo

Como familia nos encontramos en ese punto donde podemos seguir manteniendo nuestro estilo de vida y no tener que trabajar para ganarnos el pan pero eso en realidad no cambia prácticamente nada de nuestro día a día. Deja que te lo explique para que me conozcas un poquito mas. 😉

Tengo cerca de 40 años. Me queda algo más de 1 año para cumplirlos.

Llevo casi 20 años trabajando e ingresando dinero.

Mas de 20 años invirtiendo también.

Y haciendo cálculos podríamos decir que como familia hemos llegado a ese amado punto de ser financieramente libres.

Ese punto donde en teoría podemos seguir manteniendo nuestro estilo de vida y no tener que trabajar para ganarnos el pan nuestro de cada día.

Ha sido el resultado de diferentes acontecimientos vitales que el azar nos ha ido regalando.

Ahora es cuando podríamos decir que hemos trabajado duro, que hemos estudiado mucho, que hemos invertido bien y que hemos creado buenos hábitos vitales.

Y seguramente muchas de esas cosas sean verdad.

Pero también lo han hecho muchos otros que desafortunadamente están como nosotros estábamos hace 20 años (sin dinero) o peor (con deudas) y además con pocos ánimos para darle la vuelta a la situación.

A veces no entendemos que el azar también juega su rol y que no todo es planificación y hábitos.

Pensamos que los que han tenido éxito lo han hecho todo a la perfección y minimizamos el efecto que la suerte ha tenido en su camino.

Esa suerte de encontrar a esa persona tan especial hace tanto tiempo, esa suerte de haber tenido buena salud durante muchos años que te ha permitido trabajar sin apenas interrupciones o la suerte de haber nacido en un país donde existen infinitas oportunidades de prosperar.

Todos esos hechos están ahí. Y nuestro ego no debe hacer que les restemos la importancia que tienen y nuestra poca influencia respecto a ellos.

Pero volvamos a lo que íbamos.

Los grandes números de nuestra libertad financiera

Familia numerosa, marido y mujer que trabajamos y 3 niños con edades que varían de 4 a 11 años.

Y piso (espacioso y con terraza) pagado.

Coche pagado también (aunque casi no lo usamos y -lo siento- aún no he sabido interiorizar bien la teoría de no tener uno para 4 días que lo usamos).

Patrimonio invertido (piso donde vivimos no incluido) de 1,2 millones de euros aunque recuerda que cada segundo cambia el valor de los activos (especialmente en esta época tan volátil y especial en la que nos ha tocado vivir y de la que seguro aprendemos mucho).

Nuestros costes recurrentes familiares mensuales (el piso donde vivimos ya está pagado) suben a algo menos de 4.000€ (3 colegios concertados + extra-escolares + comida para 5 + ocio para 5 + seguros + servicios + impuestos…).

Es decir, redondeando necesitamos 48.000 euros anuales para vivir.

Como tenemos 1,2 millones de euros de patrimonio invertidos, necesitamos sacar una rentabilidad neta de un 4% anual. Para curarnos en salud calculemos una rentabilidad bruta cercana al 6%. Si le añadimos la inflación (porque somos jóvenes y nos gustaría pasar en este maravilloso mundo muchos años aún) estaríamos necesitando una rentabilidad de nuestros activos ligeramente superior al 7%.

Y creo que los números no son inalcanzables si uno invierte a muy largo plazo.

De hecho en el PEOR periodo a 25 años el S&P500 ha obtenido una rentabilidad anualizada del 8% (ha multiplicado por 7 su valor) mientras que en el MEJOR periodo ha multiplicado su valor en más de 50 veces.

Nuestro patrimonio está muy diversificado (renta variable, inmobiliario, venture capital, caja invertida en activos sin riesgo para dormir tranquilos…) y nuestros horizontes temporales de inversión son a larguísimo plazo ya que no nos planteamos dejar de trabajar ni mi mujer ni yo al menos en la próxima década (esa es nuestra idea, el tiempo dirá lo que ocurre finalmente).

Algunos aprendizajes que hemos tenido desde que somos libres

Por todo ello, quería escribirte a ti, que buscas tu libertad financiera y que planificas para ello. Quizás ya estás cerca de ella o ya has empezado y estás en el camino adecuado para conseguirla.

No importa mucho en qué punto te encuentres.

Quería contarte algunas cosas que a mí me han ido ocurriendo. Quizás puedan ayudarte.

De entrada, ya te estás dando cuenta de que no es tan sencillo entender cuándo llega el punto en el que puedas decir que eres libre financieramente.

¿A partir de qué euro puedes decir que ya has alcanzado tu libertad? ¿El cambio de un solo euro en tu patrimonio hace que ya la alcances? ¿Tener 1.999.999 € no te hace financieramente libre mientras que tener 2.000.000 € si te hace financieramente libre?

Además, piensa que cuando alcances esa libertad financiera será únicamente en la teoría. Serás libre dentro de una hoja de cálculo.

Podrás decir que eres libre financieramente si eres capaz de alcanzar una cierta rentabilidad en tus activos. Y ahí te argumentarás en el pasado y en tus habilidades como inversor.

Todo esto está muy bien pero lo único importante en mi opinión es entender qué clase de vida quieres llevar.

Ser libre financieramente debe ayudarte a poder entender mejor qué es lo que NO quieres para tu vida. ¿Cuáles son tus preocupaciones?, ¿a qué le da vueltas tu cabeza sin parar?, ¿qué querrías hacer diferente?

En nuestro caso, nos gusta nuestro trabajo. Tanto mi mujer como yo, en cierto modo pensamos que nos pagan por aprender y por socializar con gente muy crack de la que podemos aprender mucho.

Pero obviamente, también tenemos días malos.

Tenemos presión (como todos nos la auto-imponemos principalmente) pero nos consideramos unos privilegiados de poder evolucionar profesionalmente en entornos de trabajo donde lo pasamos bastante bien.

Esa es una riqueza a la que ahora mismo no queremos renunciar.

Entendemos que quizás llegará un día que no nos compense… o que queramos cambiar de trabajo para iniciar nuevas aventuras, que nos despidan o que simplemente queramos tomar un descanso.

Para esos momentos que sabemos que llegarán en el futuro es para lo que creemos que sirve realmente de verdad la independencia financiera.

Los que más buscan la independencia financiera (y buscarla significa moverse y actuar, no solo leer blogs que venden esquemas rápidos y facilones) son normalmente los que menos la necesitan y los que menos la usarán tal como la imaginan porque su energía y su tendencia a la acción no les permitirá irse a vivir dos años a una isla del caribe a tomarse unos mojitos una vez la hayan alcanzado.

Para nada. Su inquietud vital no se lo permitirá.

Estos buscadores y creadores de circunstancias, una vez hayan alcanzado su libertad económica, diseñarán nuevos objetivos vitales y financieros que les harán avanzar hacia nuevas ilusiones y continuos aprendizajes.

Si analizas lo que ocurre con la mayor parte de personas cuando alcanzan la auto-sostenibilidad económica verás que un patrón con casi todas es que siguen trabajando. La diferencia de verdad es en el cómo trabajan

  • Algunas incluso trabajan más porque disponen de más oportunidades.
  • Algunas otras aprenden finalmente a disfrutar de la vida…
  • …muchas siguen sin entender que la vida es un todo.
  • algunas continuan siendo workaholics (cambiar de hábitos no es tan sencillo).
  • pero otras aprenden a valorar más su finito tiempo.

Esta última categoría es la que más me importa. Las que entienden de verdad que estamos de paso y que cada segundo ya no vuelve y eligen enriquecer su vida con experiencias que les aportan más. Y sobretodo deciden hacer menos de todo aquello que no les aporta ni les llena.

Es muy atractivo buscar la libertad económica. No tiene nada de malo tener ambición sana. Pero no te imagines el destino tal y como no lo es.

No es un oasis lleno de sol y ocio.

Simplemente consiste en que tus posibilidades se amplifican un poco (casi siempre los limitantes de nuestras posibilidades somos nosotros mismos y no el dinero), tu tranquilidad si usas un poco más de perspectiva vital puede aumentar ligeramente (aunque no tiene porqué) pero te aseguro que tus problemas vitales importantes de verdad seguirán siendo los mismos.

Además, a muchos nuevos-financieramente-independientes se les añade una nueva preocupación. Cuando no tienes dinero tu preocupación es crearlo. Cuando tienes algo de dinero tu preocupación es no perderlo.

Así que practica la vida antes de que seas «rico» y no te imagines un nuevo mundo a partir de determinada combinación de bits en tu cuenta bancaria.

Sino cuando llegues a ser financieramente libre habrás olvidado cómo se juega a ese deporte tan bonito que se llama «disfrutar y valorar el presente».

¡Feliz libertad!

Foto: un paisaje de Escocia de este pasado verano. El olor a hierba mojada me hace sentir especialmente bien.

Alberto P.

Padre de familia numerosa con libertad financiera desde los 36

Ver todas las entradas de Alberto P. →

6 comentarios en «Somos libres financieramente pero eso no cambia (casi) nada. El gran aprendizaje de nuestra libertad financiera que quiero compartir contigo»

  1. Primero que nada muchas felicidades, eres un ejemplo a seguir, y debo decir que lograr lo que haz hecho con tres hijos lo hace mucho mas admirable.

  2. Hola Inversor Directivo,

    enhorabuena por tu blog, el contenido es muy bueno.

    Tengo un par de preguntas respecto a tu inversión en pisos, relacionadas con el tema fiscal.

    1. En tu cálculo de rentabilidad, tienes en cuenta los impuestos que pagáis de IRPF al finalizar el año? Con 2 sueldos altos y tantos ingresos por alquileres, Hacienda debe hacer palmas con vosotros.
    2. No os habéis planteado crear una SL? Entiendo que para 1 piso no vale la pena pero para 4 yo creo que si. Además minimizaríais la tributación del IRPF.

    Es cierto que los números están bien hechos en cuanto a inversión, pero hoy en día la fiscalidad es lo que muchas veces hace que éstas no sean tan interesantes.

    Yo estoy planteando hacer lo mismo con viviendas vacacionales en una zona turística con mucha demanda y estable (excepto este año y el siguiente quizas por temas obvios). Voy a intentar si el covid19 deja precios de compra interesantes ya que este año los alquileres de muchos propietarios será 0.

    Un saludo

    1. Hola Carlos,

      Muchas gracias por tu comentario. Te respondo a tus dudas.

      1.- Al comprar los pisos para «alquiler de primera residencia» el estado nos desgrava un 60% de los beneficios que nos generan esos ingresos. Esta ley solo aplica cuando alquilas tus pisos a inquilinos que la usan como vivienda habitual ya que el estado quiere incentivar que pongas tu piso en alquiler. En el caso de alquileres vacacionales no aplica esta deducción y por tanto los impuestos del beneficio pueden ser obviamente mucho mas altos.

      De esta forma, los impuestos que pagamos por los beneficios de los pisos que alquilamos se encuentran en el entorno del 20% (del 40% del beneficio se nos aplica nuestro tipo impositivo marginal del IRPF – que se encuentra alrededor del 50% en nuestro caso).

      2.- Respecto a invertir como persona física o como persona jurídica le estuvimos dando vueltas y al final nos decantamos por hacerlo como persona física porque (con nuestro tipo de alquiler) el impuesto era muy parecido, las condiciones hipotecarias (tipo de interés más bajos) son mucho más ventajosos para personas físicas y nos ahorrábamos la gestoria. Es posible que si seguimos ampliando nuestra cartera de pisos como es nuestra intención tengamos que revisar de nuevo la situación.

      Por otro lado, la S.L. nos daba mucha más seguridad patrimonial (le seguimos dando vueltas a este tema porque es la gran ventaja de la S.L) y también nos permitía deducir algunos gastos más (son deducibles todos los gastos mientras que cuando inviertes como persona física solo puedes deducirte los gastos de conservación pero no de ampliación de la vivienda – concepto a veces complejo de diferenciar).

      En los comentarios del post titulado «Cómo NO comprar una segunda residencia me permitió invertir en 4 pisos para alquilar» verás que hay otro lector que pregunta también por las ventajas de la S.L y ahí podrás encontrar un poco de información adicional.

      Espero te sirva.

      Un saludo

  3. Hola Alberto, desde que «te conocí» por intermedio de Germán Jover (zona3) estoy encantada, me encantan tu blog, aprendo y me hace reflexionar mucho lo cual agradezco. También quiero felicitarte por tu último libro. Es buenísimo. Muchas gracias por tu aportación 😉

Responder a Alberto P. Cancelar la respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *